San Francisco de Sales, video 1




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esas bases no son otras que la dulzura y  la humildad,  pero es imprescindible que estas dos  virtudes sean virtudes de corazón dice  él, es decir que no sean una educación exterior por la cual uno se comporta con  dulzura y con un aire humilde pero sin  que el corazón tenga de verdad esa  dulzura y esa humildad.  francisco de sales dice la base de todo  es la humildad y la dulzura  pero esa humildad y esa dulzura tienen que  estar de verdad en el corazón y no ser  sólo una especie de educación de buenos  modales exteriores . estas dos virtudes están estrechamente  ligadas la una a la otra  aunque la preeminencia dice san  francisco corresponde a la humildad. la  humildad vuelve dulce nuestro corazón.  si no tenemos dulzura es porque no somos  humildes.  la humildad es la actitud que conviene a  las pobres criaturas que somos nosotros.  cuando caigamos en faltas o defectos no  nos tenemos que asombrar sino  humillarnos ante dios y recordar que su  fuerza es se muestra mejor en nuestra  debilidad  dice san francisco de sales nuestro  señor da tanta importancia a la humildad  que no tiene inconveniente en permitir  que caigamos en el pecado con tal de  poder conseguir que seamos humildes  fíjate hasta qué punto dios aprecia la  humildad  que aunque dios odia el pecado dice mira  si no queda más remedio  que caiga en el pecado con tal de que  llegue a ser humilde  porque si no cae en el pecado  pero es orgulloso  no lo podré salvar  y un poco  dice también nuestro señor está tan  enamorado de la humildad que no le  importa que perdamos todas las demás  virtudes con tal de que conservemos ésta  es como si dijéramos si eres humilde  está salvado  hombre pero es que soy humilde pero no  soy castró pongamos por caso dice san  francisco no pasa nada ya lo serás ya  llegarás a hacerlo  pero si eres humilde  si no eres humilde no  

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no amemos nuestras imperfecciones pero  si amemos la humildad que nos provoca 


debemos odiar y amar a la vez nuestras  imperfecciones dice san francisco de  sales  hay que odiarlas  porque son  imperfecciones pero hay que amarlas  porque nos hacen ver nuestra nada  y porque constituyen una ocasión para  que se manifieste en nosotros la  misericordia de dios  por lo tanto dice san francisco de sales  no amemos nuestras imperfecciones pero  si amemos la humildad que nos provocan  porque claro cuando cuando tropiezo con  mi imperfección con mi fallo con mi  pecado con mi miseria pues no me queda  más remedio que bajar la cabeza  entonces dice no amemos el fallo que  hemos tenido pero sí que amemos la  humildad que nos provoca  el espíritu de dulzura y de tranquilidad  es el verdadero espíritu de jesús san  francisco de sales observa en una de sus  cartas porque escribió un montonazo de  cartas aparte de sus obras pero la  introducción a la vida devota el  tratado del amor de dios o etc pero es  que escribió para todas sus dirigidas y  dirigidos pero sobre todo de las mujeres  pues cantidad y cantidad de cartas  en una de sus cartas dice jesús que se  pudo poner de modelo de todo  solo se puso de modelo  de la dulzura y la mansedumbre  venid a mí los que estáis cansados y  agobiados y yo os aliviaré aprended de  mí que soy manso y humilde de corazón  y dice san francisco de sales fíjate el  señor se podía haber puesto de modelo  de todo porque es el modelo de todo sin  embargo solo lo hizo de la dulzura de la  mansedumbre de la humildad para que  comprendamos la importancia de estas  actitudes  yo soy decía san francisco de sales de  sí mismo un hombre mezquino sujeto a la  pasión pero por la gracia de dios desde  que soy pastor no he dicho nunca una  palabra marcada por la cólera a mis  ovejas  una gran gracia de dios'  no enfadarse nunca con las ovejas porque  el pastor no se tiene que enfadar con  las ovejas  si las tienen que corregir que las  corrija pero que no se enfade con ellas  quién quién eres tú quién soy yo para  enfadarme con las ovejas  así pues hemos de amar nuestra miseria  porque por medio de ella se manifiesta  la misericordia de dios y se afirma  nuestra confianza en él

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la humildad tiene como objeto hacer que  nos veamos a nosotros mismos tal como  somos delante de dios en nuestra miseria  y en nuestra pobreza  y el punto más elevado de la humildad  consiste en amar nuestra abyección dice  san francisco de sales a mi me hace gracia  esta palabra abyección que quiere decir  acción quiere decir la humillación que  supone para mí ver que he fallado  ver que he metido la pata  ver que me he equivocado ver que he  pecado  pues esa humillación la tengo que amar  y en eso  consiste la cumbre de la humildad  de esa manera  exaltó a la misericordia del señor que  tiene misericordia de mí que he metido  la pata  y además al ver mi abyeccion al ver mi  metedura de pata aprecio mucho más al  prójimo porque veo que el próximo es  mucho mejor que yo  y eso también es muy importante  fijaos lo que dice el san francisco de  sales dice entre los pordioseros los  mendigos se consideran que los que  tienen las heridas más grandes y  horrorosas son los mejores porque atraen  con más facilidad las limosnas  ante dios todos nosotros somos  pordioseros  los más miserables son los mejores  porque atraen con más fuerza la  misericordia de dios  y en materia de pecado afirma san  francisco de sales hemos de mantener con  fuerza con más fuerza esta regla  cuando pecamos hemos de estar pesarosos  de haber pecado arrepentidos de haber  pecado pero hemos de abrazar de todo  corazón la abyección que se deriva del  pecado  y si uno pudiera separar las dos cosas  yo guardaría celosamente la dirección y  rechazaría el mal y el pecado  dice san francisco de sales aunque  también añaden como hombre sabio que es  dice sin embargo hay que atender a la  caridad que a veces nos exige apartar de  nosotros no sólo el pecado sino también  la dirección que de él se sigue para no  escandalizar al prójimo eso también es  verdad por ejemplo si tú has cometido el  pecado de adulterio que es un pecado muy  grave pues claro que estás  arrepentidísimo bien  pero no vayas a pedirle perdón a tu  marido  no no no  tú te lo guardas y te lo comes tú sola  como hacen algunos que le hacen una  barrabasada al prójimo y enseguida van  al susodicho prójimo a decirle perdón a  mí de que el demonio me ha pillado y  perdóname  sígalo a partir de ese momento el  prójimo si no te perdona el malo es el  no no no no  tú lo eches sobre el prójimo más cargas  de las que el prójimo ya tiene que  llevar  es pecado tu arrepiéntete y puesto que  la persona a la que has ofendido no lo  sabe  cállate y cómete tu amargura tú sola con  el señor o tú solo con el señor  pero no eches ese fardo sobre el prójimo  por eso dice san francisco de sales que  a veces la caridad te exige que uno la  abyección porque claro sería una  inyección muy grande y decirle a tu  marido mira que me ha tentado el demonio  y este puesto a los cuernos es decir  pues imagínate que adicción más grande  aparte del posible sopapo que te diera  tu marido no en fin eso que llaman ahora  violencia de género pero es decir no  la caridad te pide que tú te lo comas  solito o solita  y dice en estos casos en que la caridad  pide que ocultemos nuestra aviación para  no sobrecargar al prójimo pues hay que  ocultarla a los ojos del prójimo pero  nunca hay que ocultarla a los ojos de  nuestro corazón sino que cada uno de  nosotros tenemos que vivir diciendo qué  hombre más miserable que soy yo más  frágil que soy o más débil que soy que  he sido capaz de realizar pues esta mala  acción la que sea  dice san francisco levantad vuestro  corazón cuando haya caído con dulzura  humillan dos mucho ante dios por el  conocimiento de nuestra miseria sin  asombraron de vuestra caída  puesto que no es una cosa admirable que  la enfermedad esté enferma ni que la  debilidad sea débil ni que la miseria  sea miserable  fijaros que fino  

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porque claro a veces caemos y decimos  pero pero qué es lo que me ha pasado de  mí o sea como si yo fuera un querubín y  cómo es posible que el sí quiero bien  que yo soy haya caído y san francisco de  sales dice no hijo no te sorprendas de  haber caído porque tú no eres ningún  querubín,  tú eres un hombre de barro, como todos  los hombres  y como estás hecho de tierra pues  no sé no sé qué verbo construir haces  las cosas de los hombres de tierra cómo  estás hecho de tierra pues haces las  cosas de los hombres de tierra porque no  estás hecho de materia angélica sino de  materia terrestre  el diagnóstico que san francisco de  sales dar sobre la condición humana es  que carecemos de dulzura hacia nosotros  mismos porque no aceptamos la miseria de  nuestra condición humana  san francisco de sales constata que nos  irritamos por nuestras imperfecciones y  faltas, que nuestra mediocridad nos  exaspera, y nuestras reiteradas  debilidades ponen amargura y desprecio  en nuestro corazón 

San francisco de  sales dice: no  no no  no tienes que estar amargado contigo  mismo, lo que tienes que hacer es aceptar  que eres de tierra,  que no eres un ángel.
A una de sus dirigidas que se enfadaba  mucho consigo misma al ver sus fallos  pues le escribe quisiéramos no tener  imperfecciones pero mi muy querida hija  hemos de tener paciencia por ser de la  naturaleza humana y no de la angélica  él nos invita a esto que es una cosa muy  sana convéncete de que eres de barro  convéncete de eso  y deja de circular por la vía como si tú  fueras una especie de keruve que  inexplicablemente está aquí en la tierra  que no que no que eres de tierra hijo de  tierra  y por lo tanto pues haces cosas de la  tierra 

 hay que tener paciencia con todo el  mundo dice san francisco pero en primer  lugar con uno mismo  no nos hagamos ilusiones dice él  nuestros progresos serán lentos  y nuestras victorias siempre precarias  qué gran sabiduría que hay en estas en  este planteamiento  qué gran sabiduría. 
Nuestros progresos  serán lentos poquito a poco y nuestras  victorias ya he conseguido esto siempre  precarias lo has conseguido pero en  cuanto te descuides pluma vuelves a caer  y hay que saberlo así  y no tener la pretensión de que voy a  avanzar en la vida espiritual pero vamos  que en cuanto sube un escalón ya no  vuelvo a bajar ese escalón pero vamos en  toda mi vida porque esto va a ser una  escala una subida imparable pues san  francisco de sales dice nuevo hijo no  los progresos son siempre precarios  son lentos y las victorias siempre  precarios  es un grave error querer hacer el ángel  dice cuando en realidad la perfección  que debemos de realizar es una  perfección propiamente humana que avanza  poco a poco y que utiliza incluso  nuestras caídas para santificar nos  no podemos pretender ser curados en un  solo día de tantas malas costumbres como  hemos contraído por causa del poco  cuidado que hemos tenido de nuestra  salud espiritual  que es de sentido común o sea vamos a  ver  si yo soy un cotilla empedernido de toda  mi vida que me paso la vida rajando de  todo el mundo  llega un momento en que por fin el  espíritu santo me hace ver que eso es  pecado hasta ese momento ni lo he visto  he pensado que solo la cosa más normal  del mundo  pero por fin el espíritu santo me hace  ver que eso es pecado qué es eso de ir  por la vida rajando a todo el mundo  pues bueno pues a partir de ahí  no vas a pretender que en un par de días  tú vas a dejar de ser un cotilla  sino que vas a tener que realizar ahí un  combate espiritual  y en el que poco a poco con la gracia de  dios y las avanzando y de cuando en  cuando una recaída porque te descuidas y  ya estás  san francisco de sales es realista  dice él es cierto que dios ha curado a  algunos repentinamente sin dejarles  ninguna marca de sus enfermedades  anteriores por ejemplo la santa maría  magdalena dice pero eso lo ha hecho el  señor muy pocas veces  la mayoría de las veces ha dejado muchas  marcas de sus malas inclinaciones  a sus amigos por ejemplo a san pedro  pues san pedro' incluso después de su  conversión pues seguía teniendo marcas  de sus malas inclinaciones y eso es lo  más normal  por eso no nos hemos de asombrar de  nuestras miserias  es que somos tan vanidosos que cuando  nos damos cuenta de una miseria nuestra  nos asombramos como diciendo uy qué ha  pasado a mí cómo estaba yo cuando en  realidad los tendríamos que asombrar  cuando hacemos una obra buena  cuando hacemos algo buenos cuando  decíamos que deberíamos de asombrarnos y  decir ay gracias señor qué maravilla que  tu gracia me ha acogido y me ha hecho  capaz de realizar esto 

min 38. 

Acepta tu cruz, acomodate a ella
 en cambio en nuestra vanidad hace que  nos asombremos cuando descubrimos un  fallo nuestro como diciendo yo que soy  el jardín de todas las virtudes mira por  donde un bichito en el jardín pero  hombre si no eres el jardín de todas las  virtudes , jardín de todas las virtudes es cristo y  sólo a él  y después  la santísima virgen ya  partir de ahí a currar todo el mundo

  no os asombreis jamás de veros miserable y  colmada de malos humores, le escribe a  una monja, no os asombreis de esas inoportunidades y violencias que sentís, no  hija mía, no os asombreis en absoluto,  que vuestras miserias y enfermedades no  os asombre no os asombren, dios las ha  visto ya muchas veces y su misericordia  no rechaza a los miserables sino que se  ejercita en hacerles el bien poniendo la  sede de su gloria en su abyección o sea  en la vergüenza y la humillación que  sienten por esas miserias y ahí es donde  el señor dice aquí pongo el trono de mi  gloria  aquí pongo el trono de mi gloria  
nosotros en cambio queremos  más o menos decir voy a ver si quito  todos mis defectos si en mí ya no hay  más que virtudes y entonces el señor  pondrá el trono de su gloria en mí  porque mi ya no habrá más que virtudes y  habrá una vanidad que vamos que te la  pisas la realidad  san francisco de sales no dice  eso, arrepiéntete de tus miserias y en esa  humillación en esa dirección que hay  por haber caído me las hay  es donde el señor pondrá el trono de su  gloria  en su humilde arrepentimiento  en tu dolor por haber caído  ahí está el trono de la gloria del señor  
el secreto para establecer nuestro  corazón en la  humildad es acoger benévolamente las  incomodidades y los fastidios propios de  nuestro estado de vida la miseria de  nuestra condición humana  las pruebas que dios nos envía o sea en  aceptar lo que nos toca eso que las  mujeres del pueblo dicen pues mira lo  que lo que me ha tocado  pues eso en esa expresión hay una gran  sabiduría  que la tienen nuestras buenas mujeres de  los pueblos  la tienen porque las veces que llevan  unas cruces inmensas y las llevan como  si no pasara nada, mira don fernando pues  lo que me ha tocado que vamos a hacer, si  a cada una le toca una cosa y no están  diciendo, ay qué cruz que me ha caído, no  no, lo que me ha tocado a mi me ha tocado eso, a otro   otra cosa en aceptar eso con toda  naturalidad  en eso está el secreto para que nuestro corazón more en la humildad

min 41. el amor propio de un ego exagerado

el enemigo de todo esto dice san  francisco de sales 
es nuestro amor  propio te pone una venda sobre nuestros  ojos y nos hace creer que somos de una  esencia superior a la de la humanidad  pecadora cuando en realidad no es así  el amor propio puede ser mortificado en  nosotros pero nunca arrancado del todo  por eso de cuando en cuando brota en  nosotros para que recordemos que aunque  haya sido cortado por la base su raíz  todavía permanece en nosotros  el amor propio se está a veces quieto dice  como un zorro dormido pero al igual que  usted saltará repentinamente en cuanto  vea una gallina  y dice pués así es el amor propio a lo  mejor a veces que está ahí dormido que  ella como si no estuviera amigo espera  que pinchen te pinchan el zorro salta  por la gallina  porque no desaparece del todo  nunca en esta vida  por eso dice él hay que permanecer  siempre vigilantes  y defenderse de él con paciencia y  dulzura vigilando sus movimientos para  desautorizar los apenas alcanzó  recogerlo del cuello de dicho quieto  porque es así parece que tenemos dulzura  que somos humildes hasta que llega  alguien y plan nos pisa el callo  empezando el caño salta el amor propio y  dice san francisco de sales hay que  estar vigilantes  y en cuanto salte cogerlo y  desautorizarlo  es decir quién soy yo  esa pregunta es muy importante quién soy  yo  decírselo cada uno a sí mismo quién soy  o quién soy yo para enfadarme quién soy  o para censurar quién soy yo para  criticar quién soy yo para lamentarme  quién soy yo  como las raíces del amor propio penetran  hasta las fibras más íntimas de nuestro  ser nunca seremos completamente dueños  de los primeros movimientos que producen  en nosotros  es decir ese primer movimiento eso nunca  lo controlaremos  y el señor nos pide que controlemos ese  primer movimiento sino el segundo  el primer movimiento es que me pisan el  caballo y el salto  eso el señor nos que los dominamos  porque sabe que no lo podemos dominar  pero si el segundo y es que el salto y  pararlo  a largo  y por lo tanto no dejar que el zorro  salga fuera salta dentro de mí ver lo  cojo del cogote y los sujetos dentro de  mí sin que salga afuera  el amor propio la estima de nosotros  mismos la falsa libertad de espíritu son  raíces que no podemos arrancar  fácilmente del corazón humano  tan solo podemos impedir que produzcan  sus frutos que son los pecados pero sus  impulsos sus primeras ocurrencias sus  brotes sus primeros movimientos no  podemos nunca impedir los mientras  estemos en esta vida mortal  por eso hemos de tener paciencia e ir  poco a poco  enmendando y recortando nuestras malas  costumbres tomando nuestras aversiones y  superando la habilidad de nuestros  humores e inclinaciones esta vida  querida hija le dice a una religiosa es  una guerra continua  una guerra continua  nadie puede decir y ha llegado no en  esta vida nunca hemos llegado  debemos de saber y de aceptar que los  ataques de las pasiones son inevitables  en esta vida mortal y que el amor propio  solo desaparece cuando morimos  por lo tanto no nos hemos de enfadar  demasiado por estos ataques sirven para  mantenernos en la humildad y ejercitar  nos en la valentía  la humildad que es la virtud de las  virtudes porque estamos todo el tiempo  hablando de ella porque el tema del  retiro es las bases de la santidad y las  bases de la santidad son la humildad y  la dulzura que se puede reducir a la  humildad porque el que es humilde es  dulce  la humildad que es la virtud de las  virtudes virtudes debe de ser generosa y  apacible  con todas atrás debemos orar diciendo  señor ten misericordia de mí que estoy  enfermo  así lo han hecho los santos  san felipe neri que era muy gracioso a  ver si más adelante hacemos un retiro  sobre san felipe neri que es un santo  divertidísimo además de quiero decir de  profundísimo el san felipe neri y ahora  va al señor diciendo señor ahora que yo  ya empiezo a fijarme de ti por favor tú  no te fíes de mí  fíjate que es sabiduría  ahora que yo ya empiezo a fijarme de ti  tú por favor señor no te fíes de mí como  yo no no no no me sueltes y no me dejes  porque es que si no seguro que te la  hago  el señor nos deja siempre en nuestras  pequeñas colegas nuestros pequeños  disgustos nuestros pequeños temblores  del corazón que son como los residuos de  nuestras enfermedades para que tengamos  la recaída y para que nos humillamos y  vivamos en una sincera sumisión sin  embargo con la ayuda de dios iremos poco  a poco restableciendo nos del todo y  estas pequeñas alteraciones irán  disminuyendo los santos nos dice san  francisco de sales nos han enseñado que  debemos considerar que cada día  empezamos nuestro caminar en la  perfección por lo tanto cada día al  levantarse hay que decir hoy empiezo  y empezar con todo entusiasmo como la  primera vez  en ese sentido 

min 49
en las bases de la  santidad  junto con la humildad está la sencillez  la sencillez consiste en caminar sin  desvíos sin pliegues sin recovecos  san francisco de sales inculca con una  gran insistencia a la sencilla que dice  por ejemplo hay que ser sencillos en el  lenguaje  la sencillez en el lenguaje consiste en  varias cosas primera de todas no mentir  nunca  además yo suelo decir porque creo que es  verdad si quieres que la gente no te  crea y siempre la verdad  estudio la verdad nada es como la gente  no se lo cree  no hace falta mentir todo y la verdad no  se lo creerá a nadie  bueno con muchos no se lo creerá pero en  cualquier caso no mentiré nunca  porque si mentimos nos hacemos cómplices  del padre de la mentira que es el  demonio  mientras que el espíritu santo es el  espíritu de la verdad  la sencillez consiste en no hablar de  nosotros mismos ni para bien ni para mal  salvo por pura necesidad y en ese caso  siempre con una extrema sobriedad  no hablar de nosotros mismos  en contra de eso que está tan de moda  porque el cni ways y compañía no es más  que mirarse el ombligo y cada uno lo que  quiere es contar sus propias  experiencias las monerías que hay en su  corazón en su alma los recovecos de su  interioridad lo que el señor le ha hecho  sentir y hay que guapito que soy y que  poquito que me miro a mí misma y todo el  tiempo así  san francisco de sales dice no hables  nunca de ti mismo más que cuando no haya  más remedio porque a veces no hay más  remedio y entonces habla con extrema  sobriedad  la sencillez del lenguaje consiste  también en no dar libre curso a la  vivacidad ingeniosidad de nuestro  espíritu  o sea a esos juegos intelectuales para  que se vea lo listo que yo soy el  comentario inteligente  es como una espada  al tuyo tocado  y sus juegos de ingenio a los que tan  aficionados somos  san francisco de sales dice no los hagas  porque eso te aparta de la sencillez  la regla de oro dice él es esta no hacer  ni decir nada para ser alabado ni  tampoco dejar de hacer o de decir nada  por miedo a ser alabado  o sea tú no hagas nada para que te  alaben pero tampoco dejes de hacer una  cosa que tú veas que debes de hacer por  miedo a que te alaben tú haz lo que  tengas que hacer y despreocúpate de las  alabanzas o de las críticas  ese es el camino de la sencillez  sencillez por lo tanto en el lenguaje  sencillez también en la conducta  la sencillez en la conducta consiste en  ser lo que se es  es decir en aceptar de todo corazón la  vocación que uno ha recibido y en  adherir a ella con toda sencillez  evitando las escisiones internas  la clave última de la sencillez consiste  en no tener otra pretensión en todo lo  que hacemos que la de adquirir el amor  de dios' la de hacer la voluntad de dios  la de contentar a dios en todo o como  diría teresita la de amar a jesús tú  preocúpate de amar a jesús y no busques  otra cosa más que amar a jesús y eso  unificar a todo tu ser y te hará  sencillo  la sencillez consiste en servir a dios  sin agudeza y su utilidad  o sea sin rebuscamientos  aceptando la inevitable imperfección  inherente a la naturaleza humana  no hay que entretenerse examinando  detenida y sutilmente cuál es la mejor  manera de servir a dios sino servirlo  con franqueza directamente a la pata la  llana como decimos aquí a la humana dice  san francisco de sales ya habrá tiempo  de hacerlo a la divina cuando estemos en  el cielo  pero aquí en la tierra sirve a dios con  sencillez con franqueza como te sale  como sabes cómo entiendes sin complicar  que la vida sin rebuscamientos  interiores porque a veces hay personas  que se pasan el día mirándose a sí  mismas y parece que yo para servir a  dios tengo que ejercitar el carisma que  dios me ha dado que es el de limpiar la  capilla del sagrario a las cinco de la  tarde mí a ver dónde  y si no hago eso a las 5 de la tarde  pues resulta que ya ya ya ya no puedo  ser santa pero qué tontería son esas  y en este sentido san francisco de sales  insiste yo diría brutalmente porque es  un punto fundamental en el en lo que  llama amar la propia vocación  él dice uno tiene que cumplir  cuidadosamente los mandamientos propios  de su vocación de la que dios le ha dado  y quien no lo hace aunque resucite a los  muertos no deja de estar en pecado y si  muere condenado  a modo de ejemplo él dice está mandado a  los obispos que visiten sus ovejas que  les enseñen las encaucen las consuele  si yo dice san francisco visuales que  soy obispo permanezco toda la semana en  oración ayuno toda mi vida pero no  cumplo este deber mío  de visitar a las ovejas y de enseñarlas  me pierdo me condenó al igual que se  condenaría a una persona casada que  hiciera milagros pero que no cumpliera  con sus deberes de casado  san francisco de sales se dio cuenta de  que los hombres tenemos una tendencia a  querer estar siempre donde no debemos de  estar o sea  el casado a decir yo debería haberme  hecho sacerdote o debería de haber sido  monja  la monja a decir yo yo debería debería  haberme casado porque el soldado el  sacerdote a querer ser obrero el obrero  a querer ser sacerdote y san francisco  de sales dice esto asunto es para ajuste  con el que no vamos a ningún lado  cada uno tiene que estar centrado en su  vocación que es la que dios le ha dado y  tener el corazón en un lugar diferente  del lugar en el que dios lo ha puesto es  un desastre  es necesario dice el que permanezcamos  en la barca en la que estamos para hacer  el trayecto de esta vida a la otra y que  permanezcamos en ella con mucho gusto y  amablemente porque incluso si no  hubiéramos subido a la barca por la mano  de dios sino por la de los hombres desde  el momento en que ya estamos en ella  dios quiere que permanezcamos  fíjate que es útil que es esto  incluso aunque no hubiéramos llegado  allí digamos por el camino recto  por ejemplo un gran santo san francisco  perdón san vicente de paúl se hizo  sacerdote por un mal motivo  se hizo sacerdote por salir de la  pobreza  y sin embargo llegó a ser un gran santo  eso está en la vida de san vicente de  paúl  san vicente de paúl era de una familia  que no tenía ni para hacer cantar a un  ciego  y la presión de la pobreza le llevó a él  al sacerdocio se dio cuenta después y se  arrepintió de eso pero no cambió de  marca  por eso esa observación es muy fina  tu permanece año  porque eso es lo que el señor quiere y  permaneciendo ahí te santificarás  el mal de los males entre las personas  de buena voluntad es el querer siempre  ser lo que no pueden ser y al no querer  ser lo que no pueden dejar de ser  hay que aceptar realmente nuestro estado  de vida sin pretender evadirnos de él  con ningún pretexto  para mí  porque bueno pues yo veo los matrimonios  que el sábado por la tarde pues eso  salen a pasear cogidos del brazo se van  a cenar oa tomar o alfie make up yo pues  me tengo que ir solos  o si voy acompañado pero sin coger todo  el brazo porque vas a hacer  tienes que afectar las condiciones del  estado del día que dios te ha dado  bien  y bueno y el que es casado pues lo mismo  si todo tiene ventajas e inconvenientes  para ir a dios hay ciertamente multitud  de caminos que jamás instale antes que  el nuestro  reconozcamos su excelencia pero  entreguemos los con todo nuestro corazón  al camino en el que dios nos ha puesto  pues es en el en el que dios nos quiere  hay que amarlo que dios ama ahora bien  él ama nuestra vocación amamos la a  nosotros también y no nos entretengamos  pensando en la vocación de los demás  porque eso es la tentaciones que pueden  quedar cabos  el cura oye una cosa a lo mejor en el  confesionario y dice hay que ver qué  pedazo bestia que tiene esta mujer de  marido si yo me hubiera casado yo no yo  no sería así con mi mujer es la  siguiente banda pensar en si yo eso está  fuera de lugar  el cazador viene a misa hoy al cura dice  que qué pedazo por rico locura este si  yo fuera cura  para qué piensas eso si yo fuera cura  tú eres cura y vas a hacerlo eres casado  concéntrate en tus deberes de casado y  acura en sus deberes de cura  y dejemos los dos pantallas porque eso  nos saca de la sencillez y de la  humildad y por lo tanto también de la  dulzura  san francisco de sales insiste mucho en  que le tiramos a dios la gracia de amar  nuestra propia vocación  cada uno la que ha recibido de dios pues  ahora durante media hora se lo podremos  pedir al señor presente entre nosotros  en el santísimo sacramento en el nombre  del padre y del hijo y del espíritu  santo  

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