Durante ‘La familia’ pasaron cosas que no quiero contar públicamente.
Cosas que evidentemente me afectaron y que tenía que procesar. Lo que tengo claro en la vida es que la única manera de afrontar algo es no acumulando sensaciones negativas en mi espalda.
Porque a mí si voy acumulando esas cosas se me nota, después porque me hace sufrir y tercero porque no me permite evolucionar.
Yo soy una persona que he estado en terapia prácticamente desde niña y me conozco, me autoanalizo, me autocritico, pero también es verdad que he aprendido un poco a mimarme, y a cuidarme, que no es fácil.
Y esta desconexión tanto social como televisiva que he tenido en verano me ha ayudado a empezar esta etapa sin arrastrar nada feo.
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